sábado, 31 de diciembre de 2011

¿UN DESCUIDO DE HAL FOSTER?




SIEMPRE que me pongo frente a la plancha 220 de Príncipe Valiente —efectivamente, la del pulpo gigante— me da por pensar si acaso el maestro Foster se despistó durante su realización y, como ésta era tan ardua y compleja, pues decidió dejar las cosas como estaban. O quizá es que iba un poco pillado de tiempo con las entregas y tuvo que dar por buena una estructura de página que se me antoja algo defectuosa. Porque verán ustedes: ¿no les parece que en la citada plancha hay algo que falla, que no funciona del todo como debiera y que presenta una composición inadecuada para la tensión dramática (e incluso, si me apuran, hasta para la lógica de la lectura)? Es que ésa es la sensación que siempre me ha dado a mí cada vez que la veo. Intentaré explicarles lo que quiero decir con un par de imagenes de la propia página. Perdonen ustedes que se las traiga de la vieja y defectuosa edición de Burulán (¡en blanco y negro, además!), pero es que no tenía a mano ninguna otra en este momento, y para lo que quiero mostrarles creo que valdrá igualmente.

He aquí el orden de lectura de las viñetas, tal como lo dispuso Foster. Las numeró para que no hubiera error (aunque en esta edición, como pueden ver, se eliminaron dichos números, a excepción del 4, porque era el único que no podía borrarse sin tocar el dibujo)



Como les digo, siempre he creído que este orden de lectura impuesto por Foster en la citada página no sólo rompe el crescendo en el suspense de lo que se está narrando, sino que además da lugar a una solución mendaz y artificiosa que siempre me ha irritado especialmente, y de la que encontramos paralelismos en otros medios como el cine. Es el caso, por ejemplo, de Sunset Bulevard, donde la voz en off que nos habla desde el comienzo de la película —y que acabará contándonos toda la historia— resulta que es la del personaje que aparece... Bueno, lo dejaremos ahí por si alguien no ha visto esta obra maestra de Billy Wilder. Pero ustedes saben a lo que me refiero. Evidentemente un sinsentido. Pues bien, en el caso que nos ocupa, ocurre algo parecido, porque yo me pregunto: ¿si ya han arrojado dentro del pozo a Val —según el orden de lectura propuesto por Foster—, cómo es que no se le ve colgando en la gran viñeta donde aparece el enorme cefalópodo?

Es indudable que el discurso narrativo y el orden de lectura occidental obligan a cerrar la página en la parte inferior derecha de la misma, pero no me negarán que en beneficio del suspense y de la lógica de la acción, las viñetas de la plancha que analizamos deberían leerse mejor en el siguiente orden:



Así pues, para conciliar mantenimiento del suspense, lógica narrativa, credibilidad y orden de lectura Foster bien podría haber adoptado una composición de página y un tipo de viñeta como las que planteo a continuación. Se trata de una fórmula que puede parecer infrecuente a primera vista viniendo de este autor, aunque tampoco es demasiado atrevida y, de hecho, creo recordar que existe alguna propuesta parecida a lo largo de la serie:


Bueno, y ésta era la tontería de la que deseaba hacerles partícipes el último día del año: ¿ustedes qué piensan? ¿Ven que algo falla en la composición de la página que todos conocemos, o es una suposición mía?

Y una última cosa, por favor: que nadie se vaya a tomar esto como una propuesta seria. Se trata de un simple y puro divertimento que les planteo antes de entrar en 2012. Esa es la única intención y espero no haber dado ideas a más de uno para poner en práctica "restauraciones" creativas de las planchas de Foster. Lo digo, porque les conozco... Je, je, je...


¡¡¡Que tengan una buena salida y entrada de año
y a pasarlo bien (pero sin molestar a los vecinos, ¿eh?)!!!



55 comentarios :

  1. Es una licencia estilística del maestro. Le interesa dejar la viñeta del pulpo para el final. Es su forma de decir "¡¡¡tacháaaaaan!!!"

    ResponderEliminar
  2. Efectivamente, FRAN, es muy posible que le pudiera al maestro más el afan de preciosismo que la utilidad narrativa. Le salió la vena de ilustrador que llevaba dentro, antes que la de contador de historias...

    Feliz aña ya...

    ResponderEliminar
  3. Sí. Falla narrativamente... Y es mejor la que planteas tú (o la numeración anterior), pero bueno... no sé... creo que pensé en ello la primera vez que lo leí, pero luego nunca le he vuelto a dar mayor importancia.
    Feliz Año

    ResponderEliminar
  4. Hola David, Feliz Año Nuevo.

    Reitero lo que ya le dije a FRAN: pudo más en el bueno de Foster su criterio como ilustrador, que el de narrador de historias. Pero bueno, a la postre: ¿qué importancia tiene una gota de agua en el desierto? O invirtiendo los términos: ¿qué importa una gota de arena en el océano? Ya digo que sólo era un divertimento...

    Saludos cordiales.

    ResponderEliminar
  5. La solución que das es la misma de Raymond en la plancha de la carga de los hombres halcón, una composición en diagonal, pero algo incómoda, pues deja zonas muertas en las esquinas de la viñeta del pulpo. Creo que no tuvo porqué caer en el fallo, la viñeta donde Val es empujado dentro del abismo no es precisa para la historia, podía haberse dejado para la semana siguiente.

    ResponderEliminar
  6. Claro que hay un fallo en la composición, pero tales cosas no son raridad en Foster. Peor es que en la plancha 307 Val corta la mano derecha de Thundaar pero la que vuela en el aire es la izquierda.
    Y, si, es verdad que el discurso narrativo y el orden de lectura occidental obligan a cerrar la página en la parte inferior derecha de la misma, pero con la plancha 809 Foster ni esa regla respecta. Pero, peor aún, es la enorme confusión de identidades en la plancha 1573...
    Todavía, ¡COMO ERA GENIAL ESTE ARTISTA!

    ResponderEliminar
  7. ¿Y Adolfo Garcia no lo ha correjido?

    ResponderEliminar
  8. Hola EMILIO, Feliz Año Nuevo.

    Para mí no cabe duda de que la viñeta en que están arrojando a Val dentro del pozo es la que mayor tensión dramática encierra y donde, narrativamente hablando, debería cerrarse la página (y, de hecho, si Foster no hubiera caído en ese preciosismo del que hablo posiblemente la habría dejado como final, pues es la que antecede a la gran ilustración "pulpera"). En este sentido, yo no creo que debiera prescindirse de ella, ni incluirla en la dominical de la semana siguiente, pues pierde parte de su función y de su fuerza dramática. Por otro lado, si te fijas bien en la viñeta original de Foster hay muchas más zonas muertas que en la modificada que he puesto yo, donde todos los elementos de la composición se ajustan bastante mejor a los bordes de la viñeta. Con esta ampliación" se pierde en monumentalidad, ciertamente, pero se gana en detalle y, además, se llenan los huecos mejor (¡que Wotan y Foster me perdonen por mi atrevimiento!).

    En todo caso conste una cosa: pese al título que le he puesto a la entrada, y a la lista de gazapos que nos trae el erudito LEÓNIDAS --¡hola Leónidas, Feliz Año también--, he de confesaros que tampoco estoy muy seguro de que Foster se equivocara en la plancha que analizamos, sino que más bien no pudo resistirse a su vena de ilustrador (bueno, de hecho, a lo mejor ni siquiera quiso evitarlo). Porque buscar la solución alternativa que he propuesto yo tampoco era tan difícil (y si a mí se me ha ocurrido, ¿cómo no iba a haberla pensado él?).

    Un saludo a los dos.

    ResponderEliminar
  9. Amigo ANÓNIMO, no seas malvado, por favor...

    ResponderEliminar
  10. Es cierto que el orden de lectura que propone el maestro no es el más correcto para la acción. Cuando Foster numera las viñetas no muestra mucha seguridad en la narración en sí. Si suprimimos los números (cada vez que Foster los ha puesto) la lectura natural nos lleva en la buena dirección. Sin números es mejor.

    Por la toma del dibujo no es así pero creo que intentaba dar una visión subjetiva de lo que veía Valiente. La página propuesta no me convence.

    Un saludo, y buen año a todos.

    ResponderEliminar
  11. No veo el error por ninguna parte: Es evidente que la última viñeta es lo que ve Val, quien en la anterior está colgado ENCIMA del pozo. Lo siento, Alberich, pero creo que cuando dices que a Val ya le han arrojado dentro del pozo, es una equivocación. Aún no está arrojado, y repito,es lo que ve. En la penútima viñeta "le suspenden sobre una profunda cisterna", y en la última, suspendido, "sus ojos se acostumbran a la débil luz y contempla..."

    ResponderEliminar
  12. Tienes razón Anónimo. La toma del interior del pozo es demasiado alta para ser exactamente el punto de vista de Val pero no deja de ser una elección artística. Pero te doy la razón.

    ResponderEliminar
  13. ¡¡Herejes!!

    No, ya en serio...Estoy con "Anónimo". Yo siempre he dado por supuesto que la última viñeta es un plano subjetivo, vemos lo que ve Val en la anterior viñeta, más o menos pues alguna licencia artística hay, pero yo siempre me lo he imaginado así.

    ResponderEliminar
  14. ¡Hummmm! Muy interesantes vuestras observaciones, pero... No sé, no sé...

    Muchachos: acepto lo del plano subjetivo (que además queda muy bien como explicación), pero no me quitaréis de la cabeza la idea de que nos hallamos ante un contrasentido y ante una cesión de Foster al preciosismo, en detrimento de la lógica narrativa. Quiero empezar insistiendo en que, para mí, la penúltima viñeta es la que mayor tensión y suspense encierra de toda la plancha, luego el maestro quizá debería haber cerrado con ella (Val precipitándose al ignoto vacío: ¿qué mejor escena para introducir el archiconocido "next week"?). Por otro lado, y aun concediendo lo que dice ANÓNIMO de las 12:36 --es decir, que no hayan arrojado a Val al pozo todavía, sino que le tengan suspendido-- yo me pregunto: ¿y cómo es que no se le ve, entonces, colgando en la viñeta del pulpo gigante? Una licencia, me decís. Y puedo estar de acuerdo (y me parece bien), pero en detrimento de la lógica de la acción (insisto).

    (¡¡Que Wotan y San Foster perdonen mi atrevimiento y olviden todo lo que acabo de decir!!).

    ResponderEliminar
  15. Por cierto, gracias por vuestros comentarios...

    ResponderEliminar
  16. Ponga usted un Príncipe Valiente en sus posts y tendrá un inmediato poder de convocatoria.

    ResponderEliminar
  17. Ya te digo. Y eso es porque los viejos rockeros nunca mueren...

    ResponderEliminar
  18. Y tanto que mueren. Pero nos dejan sus discos. Y se da la puñetera circunstancia de que ninguno de los que publican los jovenzuelos se puede medir con ellos. Están mejor o peor, pero no pueden jugar en su liga.

    ResponderEliminar
  19. Yo de eso --de los discos, digo-- no puedo hablar mucho, la verdad, porque en cuestión de música me quedé en el "viejo pelucas". Je, je, je...

    Pero entiendo lo que dices, pues es aplicable a prácticamente todos los ámbitos de la creación humana. Parece como si la "era de los gigantes" hubiera pasado para siempre (¿o a lo mejor es, simplemente, que nos dejamos impresionar menos que nuestros antepasados? Vaya usted a saber...).

    Por cierto: Cesare siempre me ha parecido un personaje de lo más intranquilizador. Tan sonámbulo, tan inhumano, tan alienado... Pero me encanta El Gabinete del Dr. Caligari y, en general, el cine fantástico alemán de esa etapa (bueno, en general todo el cine mudo, hoy llamado también "silente").

    ResponderEliminar
  20. Pues ya que tira usted del hilo:

    http://littleslumberland.blogspot.com/2011/12/por-que-amo-el-cine-mudo.html

    ResponderEliminar
  21. yo me pregunto: ¿y cómo es que no se le ve, entonces, colgando en la viñeta del pulpo gigante?

    --0--

    De acuerdo con Alberich. En la viñeta del pulpo, se tendría que ver como mínimo la nuca y media espalda de Val, y también las manos y los brazos de los que lo tienen suspendido en el aire.

    ResponderEliminar
  22. Creo que estamos todos deacuerdo. La viñeta del pulpo es una toma subjetiva. Ahora, como ya he dicho antes, no es exacta. No se corresponde con lo que vería Val. Estamos ante una licencia del dibujante, eso es todo.

    Y volviendo a la narrativa de la página. Ya digo que no creo que necesite la numeración de las viñetas; sin ella se lee con naturalidad tal como Foster quería. Y el final... es un problema Hitchcock. ¿Qué es mejor suspense o sorpresa? En este caso claramente el autor optó por la sorpresa, un efecto teatral. ¡Mira el monstruo que te espera! Siendo esto muy relativo en el cómic ya que por más que queramos siempre vemos la página en su totalidad antes de leer. Anulamos un tanto la sorpresa. Las viñetas no aparecen de una en una.

    Pero qué gran página. Con error o sin él.

    Me habéis recordado "El vagabundo poeta", qué curioso.

    ResponderEliminar
  23. Soy el mismo anónimo del día 3, a las 12,36. Como no se trata de discutir, esta será mi última aportación en este tema (supongo). Sigo creyendo lo que dije ayer, es decir, la viñeta es exactamente lo que ve Val. Por ello no se ve a si mismo,y tampoco le podemos ver colgando. Si nos fijamos en la viñeta anterior, mira hacia abajo y no ve ni puede ver nada más y no es una toma por encima de su cuerpo.
    Tampoco es tan raro; por ejemplo, en la plancha 251, quinta viñeta: "entonces ve a una esbelta doncella lavarse su dorada melena". Y no vemos a Val, solo contemplamos la escena como la contempla él.

    ResponderEliminar
  24. Visto asi, está bien el razonamiento.
    En la mayoria de las viñetas cuando vemos un paisaje de fondo, se nos presenta al personaje de lado o de espaldas a nosotros y vemos por separado paisaje y personaje.
    En este caso persona y personaje están en el mismo lugar.
    Tu aportación está muy bien razonada para que sea la última.
    Lo peor es que de tanto mirar estas viñetas tan impactantes acabemos soñando con caidas al vacio y pulpos gigantes... uf uf!!

    ResponderEliminar
  25. A. TORVILA

    Creo que Foster no deseaba crear una imagen subjetiva de lo que veía Val, en ese caso ¿por qué dibujó en la parte superior derecha esos dos pies?
    ¿qué pintan ahí los pies y vistos desde una altura superior del propietario de esos pies ? Val no se pararía en observar ese detalle imposible e insignificante comparado ante la pesadilla del fondo del pozo. Prefiero pensar en que se trata de una licencia de Foster para dar espectacularidad a la página.

    ResponderEliminar
  26. Voy a seguir enredando un poco más la cosa. Pero no me lo toméis a mal... Je, je, je...

    O sea, ANTONIO L., lo que vienes a decir es que la imagen de la viñeta con el pulpo gigante es justo lo que está viendo Val (con sus propios ojitos) inmediatamente antes de caer al pozo, ¿no? Bueno, pues digo como el ANÓNIMO que me precede: no está mal la explicación. Se trata de un planteamiento distinto, novedoso e interesante, pues es una nueva forma de intentar explicar la "contradicción" que yo detecto en esa secuencia de viñetas. Muy bien.

    Sin embargo, creo que dicha hipótesis no resulta aceptable, tal y como está dibujada la viñeta del pulpo. Y es que, en cuanto la vemos enseguida se comprueba que la posición de la cámara en ella es mucho más elevada de lo que sería la altura de un hombre (como puede verse al comprobar el tamaño de los pies que aparecen en la parte superior derecha de dicha viñeta). A no ser que consideremos la hipótesis de que Foster se equivocó al dibujar dichos pies tan pequeñitos, dando la sensación

    En definitiva: si aceptamos tu explicación de que el ángulo de visión pertenece a Val, la altura estaría mal; pero si consideramos que se trata de lo que ve una cámara colocada por encima de Val (como parece indicar dicha altura), ¿por qué no se ve a nuestro héroe metido en el campo de visión de la cámara que estaría sobre él?

    No. Creo que la mejor explicación es la de que nos hallamos ante una licencia que Foster se tomó para poder mostrar ese pedazo de viñetón con el bichejo a buen tamaño. Ya digo: no pudo resistirse a la tentación de mostrarnos, una vez más, lo soberbiamente que dibujaba (aun en detrimento de la lógica narrativa).

    Pero vamos, que tampoco es un problema, porque la plancha es cojonuda y cumple con su función.

    ResponderEliminar
  27. Veo que el mi último comentario se ha montado, casi, con el de A. Torvila. Por ello deseo aclarar que cuando hablo del "Anónimo que me precede", me refiero al que escribió a las 22:16 horas.

    De todas formas, estoy de acuerdo con Torvila (así como ya la estuve con Fran y con otros intervinientes): la viñeta del pulpo es una licencia poética, un gustazo que se da Foster, dejando correr su vena de ilustrador.

    ResponderEliminar
  28. ¿Es verdad que esta plancha viene a tamaño original y reproducida del original en el libro Foster y Val?

    ResponderEliminar
  29. Acerca de la edición de PV de fantagraphics:

    ¿Va a continuar la serie con un próximo tomo 6?
    El tomo 5 ya está en prepublicación
    A estas alturas ya tendría que estar anunciado el 6 en amazon.

    ResponderEliminar
  30. Hola ALFREDO COTCHEL, ¿qué tal? Bienvenido al Nibelheim.

    Sí, efectivamente. En el libro que indicas Manuel Caldas incluyó una copia, a su tamaño original, de esta plancha. Quise hacer una fotografía de ella para publicarla en esta entrada, pero se veían todos los dobleces y no quedaba bien. En cuanto a la posibilidad de escanearla..., era imposible.

    Un saludo cordial.

    ResponderEliminar
  31. Nos liamos innecesariamente. Siguiendo la narración de Foster la viñeta del pulpo sólo puede ser la visión de Val. Creo que esto es claro. Pero también es cierto que el dibujo es una licencia. Es la visión que se muestra ante Val. Pero no es la toma que le corresponde, es demasiado alta. Nunca podría ver el exterior del pozo desde su posición, por ejemplo.

    Y, como ya comenté, narrativamente (que era lo que Alberich nos proponía) se trata de decidir entre un final de página con sorpresa o con suspense. Foster opta por la sorpresa. Hitchcock habría optado por el suspense y así habríamos visto el pulpo mucho antes.

    ¡Pero qué gran página!

    ResponderEliminar
  32. Hola ENRICH, ¿qué tal?

    Vamos a ver, no sigo de cerca la aparición de los volúmenes de Fantagraphics. Los estoy comprando puntualmente, pero ignoro cuál es su cadencia. El quinto, como bien dices, está en fase "pre-order" y, si no recuerdo mal, con él se acabaría la cosa, ya que Fanta había firmado contrato para publicar sólo los diez primeros años de la serie (es decir, esos cinco volúmenes). Eso fue lo que dijo en su momento Kim Thompson, responsable de la edición, no recuerdo dónde. Pero también precisó que si las ventas de esos cinco libros iban bien seguirían adelante con la serie. Sin embargo, no puedo decirte qué tal se han vendido los volúmenes aparecidos hasta la fecha. En todo caso, si estás interesado en la edición de Fanta, reza para que los compradores norteamericanos (y del mundo mundial) hayan sido menos cicateros con Thompson de lo que lo han sido los españoles con Caldas.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  33. A. TORVILA

    Supongo que Foster quiso dibujar esos pies para que el lector tuviese una referencia en cuanto a las dimensiones del pozo, pero a mi parecer creo que estéticamente sobran los pies pues resta dramatismo a la imagen aunque minimamente.

    ResponderEliminar
  34. A. Torvila

    De todos modos, si Foster hubiese dibujado los pies para tomarlos como referencia, la vuelve a pifiar, porque está claro que las dimensiones del pozo son bastante más grandes en la viñeta grande comparada con la viñeta donde arrojan a Val.

    ResponderEliminar
  35. La edición de Fantagraphics se vende muchisimo. Mi ejemplar del primer volumen es la 3ª edicion.

    ResponderEliminar
  36. Estupendo, porque eso puede significar que Fanta seguirá adelante con los años siguientes...

    ResponderEliminar
  37. Los pies, son una referencia para indicar la posición de Val en el momento de su visión. Son los mismos pies que se ven en la viñeta anterior, un poco mas alejados del borde del pozo y que enseñan también el final el final del vestido y la espada de dicho personaje.
    Estaria bién, conocer la opinión de Don Manuel Caldas.

    ResponderEliminar
  38. "Morgano el mago" del Capitán Trueno (15-octubre-1956) es un auténtico homenaje a Hal Foster de Victor Mora - Ambrós. Comparad viñetas del Capitán (Tomo 1 del nuevo y genuino TRUENO COLOR) con las planchas de PV 220 y 221, se nota la ya conocida admiración de Victor Mora por Hal Foster. ¿Conoceis alguna otra aventura en esto suceda?

    ResponderEliminar
  39. Las referencias a Foster son múltiples y constantes. Sigrid es una heredera de Val al frente del trono de Thule. Uno de sus mas influyentes amigos es Gundar, al igual que sucediera con Gundar Harl, quien diseñó el barco que llevó a Val a América. Morgano es el científico inventor del globo aerostático, una referencia a Morgana le Fey, hermanastra de Arturo. El pulpo de Trueno es un clarísimo homenaje a la aventura en la isla del Egeo. También Trueno partirá en un viaje a las tierras americanas.

    Otro gran autor español que homenajea a Val es Víctor dela Fuente. Su obra nos remite puntualmente a la de Foster, con casos clarísimos y otros no tanto, que en su dia expuse en mi blog.

    Por supuesto, estoy hablando de homenajes y referencias, nunca de burda copia.

    ResponderEliminar
  40. Quisiera añadir una puntualización. Trueno Color es la mayor salvajada que se le pueda hacer a un cómic. Solo se salvan las portadas. El resto para mi no existe.

    ResponderEliminar
  41. ¿Alberich, no vas a escribir sobre Cisco Kid?

    ResponderEliminar
  42. ¿Homenajes? Vale (ironía).

    ¿Ya pasamos del tema de la página? ¿No llegamos a ninguna conclusión? ¿Suspense o sorpresa, licencia artística o pifia, mala narrativa? Alberich, conclusiones. Y dime qué opinas de la numeración de las viñetas que a mi me parecen innecesarios, como ya comenté sin mucho eco.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  43. Foster numera las viñetas innecesariamente en muchas ocasiones. Véase la plancha 992, por ejemplo. A mi juicio lo hacía cuando introducía un elemento narrativo que consideraba "extraño", como una viñeta de gran tamaño. Y pienso que es una reminiscencia de Little Nemo. McCay numeraba siempre sus viñetas como si de un Romance de Ciego se tratase.

    ResponderEliminar
  44. Para mi, la numeración de viñetas es un arcaismo que debiera resultar innecesario si la plancha está bien resuelta. Revela inseguridad en lo que se está haciendo, pues no lo usaba siempre.

    ResponderEliminar
  45. Considero mas acertada la típica flechita usada cuando hay opciones contrapuestas en el orden de viñetas. ES mas visual.

    ResponderEliminar
  46. Los cómics de prensa mas antiguos eran muy conservadores en este aspecto, seguían una rígida trama reticular de viñetas idénticas donde no había lugar a la duda.

    ResponderEliminar
  47. Buenos días a todos, muchachos.

    ¡¡Vaya días de despendole que llevamos!! Pero ya terminan, por fin...

    Empezaré respondiendo a RUBÉN B. para decirle que la reseña sobre The Cisco Kid está concluida desde hace tres o cuatro días, aunque no he podido publicarla todavía porque, entre estos días de jolgorio y un viaje que tenía por medio, no me ha dado tiempo a repasarla. Pero está al caer. Espero que os guste.

    ResponderEliminar
  48. FENRIR, aunque se han dado opiniones muy interesantes, y pese a que se ha demostrado, una vez más, la utilidad de los blogs como lugar de intercambio de información, sigo pensando que se trata de una elección errónea de Foster, que se dejó llevar por su vena ilustradora, antes que por la de narrador. Estaríamos, por tanto, ante una licencia que, en mi opinión, resta suspense y frena el ritmo narrativo que lleva toda esa secuencia (secuencia que, por cierto, se continúa en la siguiente plancha).

    Una licencia que, en este caso, además lleva aparejado cierto desorden narrativo, pues en caso contrario Foster no habría sentido la necesidad de numerar las viñetas. De hecho, eso es algo que no hace prácticamente nunca --al contrario que otros autores "arcaicos", como McCay--, y que generalmente sólo vemos (como bien recuerda FRAN) en aquellas planchas con elementos que puedan alterar el sentido lógico de la lectura (una viñeta grande o de estructura especial, etc.). A mí, particularmente, no me gusta nada ese sistema, pero entiendo que el maestro viera la necesidad de introducir los numeritos en esta página, pues el orden de lectura tampoco me parece que esté tan claro a un primer golpe de vista. Y es que ésta tiende a irse hacia la derecha cuando llega a la cuarta viñeta, (para seguir un orden de lectura que me parece más lógico y que, según planteé en uno de los ejemplos, es el que debería haber utilizado Foster, cerrando la plancha con la viñeta en la que se ve cómo empujan a Val).

    En cuanto a la opción que propone Emilio --la de las flechitas-- ciertamente es más "gráfica" y la utilizan incluso autores modernos (recuerdo, por ejemplo que mi admirado Antonio la empleó más de una vez), pero sigue siendo un tanto chapucera y demuestra que el autor ha tenido dificultades para resolver la lógica narrativa en ese punto de su obra.

    ¿Sorpresa o suspense, preguntas? Bueno, he de confesar que tu propuesta me parece bastante ingeniosa y es útil como hipótesis de partida. Yo, personalmente, me decanto por el suspense, y aunque ignoro qué podía pasar por la mente de Foster en el momento de crear esta hermosa plancha, tengo para mí que su intención era, precisamente, la de crear suspense. Lo que es completamente lógico, pues era éste --y no tanto la sorpresa-- el que constituía la base sobre la que se asentaba el buen desarrollo de cualquier dominical de prensa. Y ahí está el famoso next week, creado para mantener el suspense tanto en los cómics semanales, como en los capítulos de los seriales de cine y televisión, o en las entregas de los relatos folletinescos.

    Un saludete...

    ResponderEliminar
  49. Una vez leído todo lo anterior, debéis recordar que el maestro no se puede equivocar, por eso es el maestro.

    Entonces, sigo manteniendo lo mismo:
    Foster no yerra, y sólo vemos con los ojos de Val.
    Tres consideraciones

    Primera: Se ha alegado que la necesidad de la numeración de las viñetas implica inseguridad de Foster por una mala composición de la plancha. Impensable, yo creo que numeraba cuando le apetecía. Ejemplo: estoy leyendo el último tomo publicado, de 1956, plancha 992: sólo tiene tres viñetas y Foster las numera, de modo innecesario.

    Segundo: Se ha alegado que no era lo que veía Val por los dos pies que están a un lado, y que están demasiado altos para que él los viera así, pero no es eso lo que aparece en la viñeta anterior, faltan los cuatro individuos que están junto al pozo, sólo se ven esos dos pies, y además con calzado de un color que no aparece antes, tres están descalzos y uno luce unos elegantes escarpines blancos.
    Si fuera una película podríamos hablar de fallo de raccord. Sin embargo, es poco natural, tenía la viñeta al lado.

    Tercero: Por ello, la solución más probable es la siguiente:
    Val, al ver lo que le espera, entra en situación de pánico, un fenómeno fisiológico bien conocido. En menos de 0,3 segundos el corazón se dispara a 175 pulsaciones por minuto, y se producen distorsiones sensoriales, visuales y auditivas; entre ellas el “efecto túnel” o focalización de la atención, provocada por cambios en la agudeza visual y pérdida de la visión periférica. Y esta pérdida de visión es el punto clave, su atención se centra de modo inevitable en lo que tiene delante, solo queda la visión en profundidad, pierde la visión lateral, y por eso deja de ver pies y piernas, tan solo dos pies, y confusamente; prueba de ello es el color del calzado, que no coincide con ninguno de las que vemos en la anterior viñeta.


    .

    ResponderEliminar
  50. Antonio L. me dejas con la boca abierta. Tremenda explicación la tuya. Lo digo sin ironía alguna. Fantástico.

    Pero, amigo, primero no creo que debamos endiosar tanto al maestro como para no creerle capaz de errar.

    En segundo lugar se me hace muy dificil creer que Foster se levantaba un día con espíritu matemático y otro no. Eso de que numeraba porque sí, no me suena bien. Y una página de tres viñetas puede estar mal resuelta narrativamente y recurrir a números o flechas que siempre es signo de duda o poca fe en el lector (no digo que la página que tú dices sea el caso).

    Estoy con Alberich (ves cómo todo llega, al fin deacuerdo). Todo es producto del ilustrador por encima del narrador. Podía haberlo resuelto mejor e igual de espectacular. Pero desconocemos los detalles del momento, no sabemos qué le llevó a esta solución para la página. ¿Se planteó otra? No lo sabemos.

    Y, por último, como la viñeta del pulpo sigue a la del lanzamiento de Val sólo puede ser una visión subjetiva de éste. Resuelta de modo incorrecto narrativamente y visualmente. Pero fantástica.

    Ahora que si es como dice Antonio L. (y no tengo argumentos para decir lo contrario) la viñeta es un ejemplo perfecto de ataque de pánico. Así que Alberich, tal vez tengamos que repensarnos eso del error de Foster. Por más que a ti y a mi nos guste más el suspense que el susto.

    ResponderEliminar
  51. A mi me hubiera gustado que la edición de Planeta numerara las páginas igual que lo ha hecho Bocola, es decir coincidiendo con la numeración de las planchas.

    Por lo que respecta al anónimo del 5 de enero de 2012 22:05, comentarle que la viñeta del dragón de la plancha 17 es clavadita a la viñeta de la página 4 del cuadernillo 178 del Capitán Trueno "La segunda prueba", lo podéis comprobar aquí:

    http://navarrobadia.blogspot.com/2010/12/parecidos-razonables-el-principe.html

    Mas parecidos "razonables:

    http://navarrobadia.blogspot.com/2010/12/el-principe-valiente-y-el-capitan.html

    y estos que os parecen?

    http://www.entrecomics.com/?p=69535

    ResponderEliminar
  52. y este:
    http://www.bloguedelos300.blogspot.com/2011/11/manara-y-foster-juntos.html

    ResponderEliminar
  53. ¡¡¡Jodó ANTONIO L., cómo te has “pasaoooo”!!!

    ¿De verdad crees que Foster se puso a considerar todos esos síntomas médicos a la hora de realizar su viñeta? Hombreeeee… Yo creo que la explicación es bastante más sencilla, sin tener que acudir a unos argumentos que lo complican todo. Pero vayamos por partes (como dijo Jack el Destripador).

    Para empezar, creo que los maestros, como hombres que son, claro que pueden errar. Y, de hecho, lo hacen. Ahí están los ejemplos que Leónidas ha mencionado arriba con errores de continuidad que Foster cometió. Así pues, no perdamos la perspectiva de las cosas, por mucho que nos guste un autor: Foster ha sido de los mejores —eso nadie lo discute aquí—, pero se equivocaba como todo el mundo. Y es lógico que así fuera, además, considerando lo que tenía entre manos.

    En cuanto a la explicación que nos das para justificar los errores que se ven en la viñeta del pulpo, ¡hombre!, proponer que Foster llegó a hacerse esos planteamientos médicos que tú propones me parece un pelín exagerado, por más que estemos hablando de este gran maestro norteamericano y de una de las mejores series de todo el Noveno Arte. Sinceramente... Vamos a ver: dicen los principios de la ecdótica y de la heurística, aplicados a la Filología y a la Historia, respectivamente, que a la hora de hacer la edición de un texto o de explicar cualquier fenómeno o acontecimiento siempre hay que inclinarse, como norma general, por la lección más sencilla o por la causa más fácil. Pues bien, en el caso que nos ocupa ¿no crees que lo más natural es pensar que Foster buscó hacer una concesión a lo decorativo —lo cual tampoco es tan difícil, viniendo de un dibujante con sus características y que procedía del mundo de la ilustración—, aunque con ello sacrificara, en parte, la eficacia narrativa de la secuencia? Si quieres hasta nos olvidamos de los conceptos “error” o “equivocación”, que yo manejaba en el texto principal de la entrada. Digamos, sólo, que fue una concesión, totalmente consciente de Foster a su espíritu decorativista y de ilustrador. Vamos, que deseaba lucirse ante el lector.

    En cuanto al tema de la numeración de viñetas… hummm… Fíjate que no veo a Foster —quien no daba puntada sin hilo— numerando unas viñetas sí y otras no al tuntún y sin motivo aparente. En todo caso, la cuestión tiene su complejidad. Y me explico: en principio se da una cierta arbitrariedad que puede resultar desconcertante, pues es verdad que aparecen numeradas páginas que, por su estructura, podría parecer que no lo necesitan. Pero si te fijas bien, todas aquellas en que hay números son planchas que presentan cierta peculiaridad: bien porque se trata de una página con estructura excepcional —con viñeta gigantesca, por ejemplo (planchas 767, 809, 811, 813, 814, 828, 1102, etc.)—, bien porque Foster no está seguro de haber dejado claro cuál es el orden correcto de lectura (como puede comprobarse en todas las planchas donde Val relata a sus hijos sus aventuras juveniles, o en la plancha 1145, donde ha puesto números sólo en una viñeta de las ocho que componen la plancha; precisamente en aquella que ha sido dividida en cuatro subviñetas iguales, y cuyo orden de lectura a nosotros nos parece evidente, pero que Foster no debió ver claro). Una explicación que se me ocurre para justificar la presencia de números en planchas donde teóricamente parece que no harían falta —como en la número 992 que tú mencionas— es la siguiente: puesto que Foster enviaba sus originales divididos en dos partes (tal como los dibujaba, a causa de su gran tamaño), quizá debió pensar que en esos casos concretos las viñetas tenían que numerarse para que en el Syndicate supieran el orden en que debían ser montadas para su reproducción y no hubiera equivocaciones a la hora de hacerlo, cambiándolas de lugar. No sé, es una opción, aunque desconozco la causa real de la ausencia de números en unos casos y su presencia en otros idénticos. De todas formas, difícilmente puede negarse que los números aparecen siempre en páginas con alguna peculiaridad estructural.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  54. Eso es. Lo mismo que decía yo. Estoy contigo Alberich. Y si se eliminan esos números de las viñetas no pasa nada.

    ResponderEliminar