INICIO aquí una nueva sección del blog que consistirá en la presentación de breves entradas dedicadas a destacar aquellos errores y defectos que vaya encontrándome en las páginas de mis dibujantes favoritos. Dicha sección, que no tendrá regularidad alguna y carece de contenido analítico, sólo pretende ser una excusa (como otra cualquiera) para revisitar a todos aquellos autores que más nos gustan, por lo que las observaciones que puedan hacerse aquí no han de tomarse, en absoluto, como críticas o reproches.
Y puesto que tenemos bien reciente en nuestra retina la obra del artista madrileño Antonio Hernández Palacios, ya que dedicamos la entrada anterior a hablar de una parte de la misma, pues vamos a poner en marcha esta sección de "Gazapos" precisamente con una de sus viñetas. En concreto la octava de la plancha número 28 del quinto álbum de Mac Coy, titulado Wanted Mac Coy. Abajo la tienen. A ver si son ustedes capaces de decirme dónde está el error...
Y puesto que tenemos bien reciente en nuestra retina la obra del artista madrileño Antonio Hernández Palacios, ya que dedicamos la entrada anterior a hablar de una parte de la misma, pues vamos a poner en marcha esta sección de "Gazapos" precisamente con una de sus viñetas. En concreto la octava de la plancha número 28 del quinto álbum de Mac Coy, titulado Wanted Mac Coy. Abajo la tienen. A ver si son ustedes capaces de decirme dónde está el error...
Estimado Alberich es acertijo que propones es una cuestión de cabezas: es muy importante tener las cabezas bien ordenadas.
ResponderEliminarSaludos y un fuerte soplido.
¡¡Premio para el caballerooooo!!
ResponderEliminar"C'è un errore di prospettiva!", que diría el bueno de Leone Battista Alberti... En efecto: es imposible que situándose en primer plano, como está, la cabeza y el sombrero de Mac Coy queden por detrás de los de Maxi (sobre todo, cuando éste no aparece en actitud de estar echado hacia adelante). Un gazapillo que se le escapó al maestro, sin duda, cuando estaba en la fase de entintado.
Muy bien Horacio. Te ha tocado un jamón pata negra virtual... (la cosa no da para más).
Saludetes.
Buenas noches.
ResponderEliminarCon el revuelo armado por la posible reedición de los trabajos de A. H. Palacios, estoy releyendo El Cid, y descubro un cierto parecido inicial de Ruy Díaz de Vivar con Valiente. Revisar los que podaís el tomo I, plancha 11, viñeta 2; hay medfa melena, jubón azul y colgante redondo al cuello.
Hasta pronto.
Sí, bueno. Es ésa una influencia (lejana en todo caso) que Antonio no negó nunca, confesándose un admirador de la obra de Foster. Precisó siempre, eso sí, que él no pretendía crear una historia tan poética y caballeresca como la del autor norteamericano. Y, de hecho, así fue.
ResponderEliminarTambién hay un cierto parecido en las viñetas de las primeras planchas de este mismo álbum (cuando Rodrigo y Sancho van de caza y se encuentran con Usúa y Basurde). Bien, sí... Es posible que Antonio tuviera en mente la figura de Val al dibujar esas escenas... Pero no creo que lo hiciera con absoluta conciencia y premeditación, pues si te fijas después de la viñeta que tú citas (e incluso en unas cuantas anteriores) tampoco existe continuidad en ese parecido, y en las siguientes la similitud entre Rodrigo y Val se limita casi exclusivamente al azul de la saya.
Pero bueno, es posible, pues ¿quién puede meterse en la mente de un autor cuando está creando? ¡¡Ojalá...!!
En cualquier caso, bien traída la cosa, hombre...
¡¡Que no falten las relecturas de la obra del maestro!! ¡¡Que se gasten esos tebeos en las manos de tantos leerlos...!!
Un saludete y a disfrutar de la "relectura".