sábado, 28 de mayo de 2011

EXPOSICIÓN DE TOPPI EN THIERS. PRIMERAS IMÁGENES



EMPIEZAN a llegar (y a circular por la red) las primeras fotografías de la magnífica exposición organizada en la ciudad francesa de Thiers, en torno a la obra del maestro italiano Sergio Toppi, y la impresión que uno obtiene después de verlas es de lo más prometedora, aunque algo ambigua. E intentaré explicarme. A nivel de contenido, el evento de Thiers promete ser histórico por la enorme cantidad y calidad de originales (más de 350) que se ha conseguido reunir allí (algunos de los cuales son perfectamente reconocibles en las fotografías señaladas). Ahora bien, al hablar del continente —esto es, del marco en que se desarrolla la exposición—, la cosa me ha desilusionado un poquito. Aunque lo digo con prudencia, pues todavía no he tenido oportunidad de visitarla.

 El histórico Usine du May, actual Maison de l'aventure industrielle 
de Thiers, sede de la exposición (© Blog 2)


A juzgar por lo poco que he podido ver en las fotografías que circulan, confieso que no me ha gustado demasiado el concepto visual y escenográfico elegido para presentar al visitante la obra del gran historietista milanés. Y es que los responsables de la organización han optado por utilizar un espacio completamente minimalista que no favorece ni resalta, en mi modesta opinión, las principales características de la obra de Toppi y sus innumerables virtudes. En este sentido, yo le habría dado algo más de "ambiente" a esos espacios tan diáfanos y funcionales de la antigua Usine du May, utilizando ciertos elementos que rompieran la monótona austeridad elegida. Por ejemplo, con el uso de paneles para crear ámbitos diferenciados y romper el desperdigamiento en que parecen hallarse ahora las piezas expuestas; a través del enmarcado de los originales, en lugar de colgarlos de unas varillas, como si fueran ristras de chorizos o la ropa de una colada puesta a secar; con el empleo de una iluminación siempre funcional, eso por supuesto, pero también mucho más intencionada, expresiva y sugerente. En fin, no sé... Toda una serie de recursos que, en mi opinión, habrían contribuido a potenciar el opulento barroquismo de la obra de Toppi, su marcado decorativismo y, sobre todo, su enigmático carácter. Pero son las nuevas tendencias museográficas y expositivas, y hay que conformarse con ellas.

Aunque pensándolo bien, en el fondo todo esto tampoco importa demasiado, pues lo verdaderamente significativo es lo que se muestra en ese decorado tan sosainas. Eso es lo que hace verdaderamente grande a esta exposición y la causa por la que estoy deseando que llegue el momento de acudir a Thiers para verla. Quizá cuando regrese, después de haber estado sobre el terreno, mi opinión haya cambiado por completo y tendré que escribir mi crónica en un sentido completamente distinto al que defiendo ahora. Sin problemas. Por cierto, esto me hace recordar que aún tengo pendiente un comentario sobre la exposición de Dino Battaglia que visité el pasado mes de enero en la ciudad italiana de Reggio Emilia. A ver si...

Y voy concluyendo. Siento no haber conseguido mejores imágenes. Si quieren ver una galería muy completa con fotografías a buena resolución, no dejen de visitar el sitio de Éditions Mosquito. Al fin y al cabo, han sido ellos quienes han propiciado la puesta en práctica de esta soberbia exposición dedicada al casi octogenario maestro milanés.

Un personaje de la historia Blues, 
utilizado como estatua-anuncio (© Blog 1)


© Blog 2


© Dauphylactère


© Blog 1


La cultura japonesa y los samurais, tan presentes
en la obra del Toppi maduro y tardío (© Blog 2)


© Blog 2


© Blog 1


© Dauphylactère


El maestro dedicando libros a los asistentes bajo
la atenta mirada de Michel Jans (© Blog 1)


Disfrutando del arte de Toppi (© Blog 1)


Toppi charlando con un herrero de Thiers (© Dauphylactère)


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1. © Blog 1: Quoi de neuf, place des martyrs?
2. © Blog 2: Journal d'un pousseur de figurines
3. © Dauphylactère-Éditions Mosquito

4 comentarios :

  1. La presentación es discutible, pero denota el profundo amor que se siente en Francia hacia el trabajo bien hecho, sea francés o no. Exactamente lo mismo que aquí.
    Un cordial saludo.

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  2. Exactamente. Podrá o no gustarnos el modo en que se ha expuesto el trabajo de Toppi --ya digo que yo estoy abierto a cambiar mi primera impresión negativa si hace falta--, pero, tal y cómo comenté en su momento, nadie puede dudar del enorme amor y del respeto con que lo han tratado en Thiers, considerándolo como una auténtica obra de arte (pero, sobre todo, valorando que la historieta también debe ser objeto de exposición).

    ¡Para que luego hablen del chauvinismo francés! Tanto Jans como los responsables políticos y culturales de Thiers se han dejado guiar, únicamente, por criterios de calidad (que es lo que debería hacerse siempre).

    Pero por volver al tema del montaje de la exposición, no hago más que preguntarme cómo demonios los enanos nibelungos de 1,90 de estatura podrán apreciar las excelencias de aquellas planchas que se han colocado en la parte más baja de las varillas. ¿Os habéis fijado la altura a la que se encuentran? Más o menos a la del muslo de casi cualquier mortal. En esas condiciones, no sé yo...

    Un abrazo, muchachos.

    Coda final: por cierto, ¿cómo va esa entrada-homenaje a Battaglia? Estoy deseando verla publicada.

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  3. ALBERICH EL NEGRO:
    En Madrid (por ejemplo) el Palacio de Cristal y el de Velazquez estan a la espera de que aparezca un príncipe salvador y realice allí exposiciones que merezcan la pena. ¡Paciencia!
    En cuanto a Battaglia, el homenaje lo vamos a colgar con la 500.000 entradas (que no es moco de pavo) y dado que eres el principal dedicatario, vamos a realizar un juego del que eres de los pocos capaces que pueden llegar a resolverlo. El juego consiste (si es de tu gusto jugar a eso) es que dado que se mezclan dibujos propios y del autor (saviamente combinados)es darle una proporción de porcentaje entre ambos 50/50%, 20/80% etc...
    En todo caso, esperamos que te gusten las 11 paginitas y la portada (tambien expresamente preparada para esta entrada).
    Un cordial saludo.

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  4. ¡Glubs! Espero dar la talla y estar a la altura del juego (como le dijo Bill Clinton a Monica Lewinsky).

    ¡Ah, el Palacio de Cristal! ¡Qué manera de desaprovechar los espacios! Ya le habéis echado el ojo, ¿eh, pillines? No, en serio. Precisamente por su estética decimonónica y por su decorativismo intrínseco sería un marco arquitectónico ideal para exponer, precisamente, la obra de Toppi (o la de Battaglia, por seguir con otro italiano). Aunque en general pienso que cualquier muestra historietística quedaría bien en ese lugar tan bonito y diáfano.

    Saludos cordiales.

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